Exige la sociedad extirpar de raíz el cáncer de la corrupción en el Poder Judicial

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  • El Senado de la República emitió un punto de acuerdo, para exhortar al Poder Judicial del Estado de México, para que un Juez sea destituido de su cargo.

  • La gobernadora Delfina Gómez Álvarez, se solidarizó plenamente con las víctimas del delito, particularmente con las que son menores de edad, niñas, niños, adolescentes.

La corrupción es un cáncer que carcome las instituciones y provoca daños a la sociedad, al propiciar que la justicia se convierta en una fantasía que quienes cometen ilícitos, se puedan burlar a sus anchas de sus víctimas, a causa de que la autoridad se convierte en su cómplice, a través de una cadena de incumplimientos con la obligación de respaldar a quienes han vivido en carne propia los atropellos de la delincuencia, haciendo todo, menos garantizar el derecho a la justicia.

Tal es el caso de la pequeña de 4 años que fue brutalmente abusada por su propio tío, mismo que fue denunciado, pero gracias a la “magia” de la corrupción que impera en un poder judicial putrefacto hasta sus cimientos, el caso resultó “inconsistente” para el juez Juan Manuel Alejandro Martínez Vitela, quien alegó que no había suficientes elementos de prueba en contra del imputado, por lo que optó por dejarlo en libertad.

Y si no se reunieron pruebas suficientes para hacer caer todo el peso de la ley contra el atacante de la menor, fue porque todo el proceso estuvo viciado de origen, ya que el Ministerio Público, no aportó dichas pruebas, porque seguramente en el camino se atravesaron grandes cantidades de dinero que torcieron la situación y permitieron que el culpable, fuera convertido en una inocente palomita, pese a que la denuncia en su contra, es acerca de un hecho sumamente delicado y que refiere la perversidad que puede existir en una persona que se aprovechó de la pequeña para saciar sus bajos instintos.

Pero también esa realidad refiere el grado de descomposición que existe al interior de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), lo que no es algo nuevo sino que se ha arrastrado por años, podría decirse que por décadas, donde secretarios del Ministerio Público, agentes del mismo, elementos policiacos -antes llamados judiciales y actualmente ministeriales-, así como jueces sin escrúpulos, han manchado el buen nombre que deberían tener las instituciones.

Ante este panorama, la reacción de la sociedad ha sido contundente, primero porque la madre de la agraviada se ha movilizado para exigir justicia para su hija y ha empujado con su lucha que las autoridades se abran al diálogo para encaminar los esfuerzos rumbo a que el culpable reciba un castigo ejemplar, no mayor ni menor que lo que mandatan las propias leyes vigentes.

Segundo, porque los colectivos que defienden los derechos de la gente intervinieron firmemente junto con familiares, amistades de la mamá de la menor, así como medios de comunicación, arropando a la agraviada, demostrando que no está sola.

Tercero, ante la actitud del juez, quien buscó excusas para justificar su mala acción de liberar a un sujeto pervertido e inmoral, el Senado de la República emitió un punto de acuerdo, para exhortar al Poder Judicial del Estado de México, para que el abogado sea destituido de su cargo.

La senadora por el Estado de México, Josefina Vázquez Mota, alzó la voz de manera enérgica con tal propósito, recibiendo el aval de sus compañeros en la Cámara Alta, más allá de siglas partidistas e ideologías, por lo que ahora el juez se tambalea de la silla donde despacha y puede caer en cualquier momento.

En este caso no ha prevalecido el silencio, ya que la gobernadora, Delfina Gómez Álvarez, también se ha pronunciado al respecto, solicitando de forma respetuosa pero con mucha firmeza al poder judicial del Estado de México, que garantice el acceso a la justicia a la gente y también, se solidarizó plenamente con las víctimas del delito, particularmente con las que son menores de edad, niñas, niños, adolescentes.

Es urgente que se lleve a cabo una profunda reforma al Poder Judicial del Estado de México, que se efectúe una limpia total y ese compromiso tiene que ser materializado por la nueva administración estatal y respaldado por las instituciones federales, para que la justicia sea de hechos y no un simple sueño.