Rompe el silencio Santi para exigir justicia a las autoridades judiciales

• Tremendo descontrol vial provocó bloqueo efectuado en la super avenida Lomas Verdes.

• Los manifestantes claman justicia para un menor que fue violado por Carlos ‘N’ a quien hoy lo defiende un ex magistrado judicial.

Ante lo que calificaron como ineptitud e incompetencia de las autoridades judiciales, un grupo de personas que exigen justicia para Santi, el joven que fue objeto de abuso sexual en el municipio de Atizapán de Zaragoza hace dos años, realizaron un bloqueo sobre la super avenida Lomas Verdes, para exigir que el victimario Carlos “N”, reciba una sentencia condenatoria y todo el peso de la ley, puesto que indebidamente fue liberado por una jueza.

En medio de un absoluto hermetismo por parte del personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y funcionarios del gobierno estatal que acudieron al lugar de la protesta, donde una servidora pública de nombre Yazmín Guajardo, se negó tajantemente a proporcionar cualquier información, bajo el argumento de que se trata de un caso delicado, los inconformes denunciaron el mal proceder de quien otorgó la libertad al presunto responsable.

Apostados sobre dicha vialidad y en presencia de elementos de la policía municipal que pretendían impedir el bloqueo, los manifestantes expresaron su total apoyo a Santi, quien por primera vez habló públicamente sobre lo que le ocurrió y respecto a su postura sobre la forma en que se ha llevado su caso, así como su exigencia a las autoridades para que no prevalezca la impunidad.

“Lo único que exijo es justicia, hace dos años fui violado, le demando a la Fiscalía y al gobierno que hagan su trabajo, que no se vendan, que se aplique la justicia de forma transparente, que todos los niños que han sido violentados alcen la voz porque no están solos,”, precisó.

La víctima añadió que lo que pide es que se realice un juicio justo, que desemboque en una sentencia condenatoria y que no haya más abusadores en las calles de México, ni en ninguna otra parte del mundo; “esta lucha es por todos los que no pueden hacerlo, es por todos aquellos que han sido objeto de algún abuso, porque lo que me pasó le puede suceder a cualquier persona, me siento muy bien de poder alzar la voz y de saber que cuento con el respaldo de tantas personas”, dijo.

Al mismo tiempo, denunció que estos dos últimos años han sido muy difíciles para él, puesto que ha recibido amenazas de muerte, lo han estado siguiendo en todos sus movimientos, ha caído en depresión y no es ya la persona que anteriormente era, sin embargo, apuntó, “seguimos adelante creciendo y evolucionando”.

Y sugirió a la niñez y juventud que cuando se sientan en una situación de riesgo, se lo comenten a la persona a la que más confianza le tengan y pidió a los padres de familia, que cuando sus hijos les cuenten algo así les crean.

Añadió que debido a que las autoridades no han sentenciado condenatoriamente a su atacante, ni han emitido una orden de restricción para que no se acerque a él, decidió suspender sus estudios temporalmente, por lo que por su propia seguridad y porque tiene miedo, no está acudiendo a la escuela. “Por este hecho que pasé mi vida se destruyó”, afirmó.

Además, cuestionó el modo de ingreso a los moteles, como en el que fue agredido sexualmente, donde se supone que deben pedir a los huéspedes una identificación, pero luego esto no es así, lo que podría significar que ese tipo de negocios pudieran estar coludidos con quienes cometen esa clase de ilícitos.

Por su parte, Valeria, madre de Santi, criticó que las autoridades que se presentaron al lugar de la manifestación los condicionaran, ya que para poder entablar un diálogo con ellos, les solicitaron retirar el bloqueo a la avenida Lomas Verdes.

“Hace dos años solicité ese diálogo y nunca fui escuchada, el pedófilo está hoy en día libre porque no se opuso la Fiscalía al cambio de la medida cautelar, ahora nos proponen una mesa de trabajo, pero todo lo veremos a través del asesor jurídico”, señaló, demandando al presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de México, Ricardo Sodi, así como a la gobernadora, Delfina Gómez, justicia para su hijo.

Finalmente, ante la realización de la protesta, las autoridades estatales trataron de deslindarse de la responsabilidad de un asunto que es de competencia del poder judicial y ahora intentan dejarlo en manos del municipio de Naucalpan, cuando no es un asunto que le corresponda resolver al ayuntamiento.